Otra Mente Brillante Arruinada por la Educación

8 feb 2010

A Veces Se Hace Largo...


Ayer a la tarde leí un cuento - leí varios, bah, un sólo cuento a mi no me llena, soy glotona - pero el que nos compete se llama The Corsage y no me acuerdo de quien es porque no lo tengo a mano como para aclararlo, pero doppo hago un adendum.
El cuento cuenta - mal cuento sería si no contara algo - la historia de una chica, enamorada de un chico - cómo la mayoría de las chicas - que se agencia un corsage al que le pusieron una maldición - el del título, por si no habían caido - que concede tres deseos a su porteador. Obviamente, siendo como es una maldición y no Robin Williams pintado de azul encerrado en una lámpara, las cosas no salen como uno quisiera y cuando ella desea que él la invite al baile, el flaco va y se mata al caerse de la torre de agua, donde estaba escribiéndole un graffiti. Hasta ahí triste, pero así es la vida. El cuento continúa, pasan un par de semanas y la noche del baile, Frankie - que así se llamaba la pava alrededor de la cual gira toda esta historia - llena de desconsuelo, desea, contra toda advertencia, que el pibe vuelva a la vida. Sentada en el suelo de su casa, sola y a oscuras - porque es un cuento de terror, obvio que va a estar sola y a oscuras - la chica escucha que algo llega hasta la casa medio cojeando, medio arrastrándose. Recién ahí cae en la cuenta de que el pibe se había hecho percha al caer de la torre de agua y no sólo eso, si no que ha estado enterrado mas de dos semanas y eso no puede ser bueno para una anatomía. El cuento termina con el chico tratando de entrar a la casa, disculpándose por haber tardado tanto, disculpándose por estar dejando todo hecho una pena, pero que algo no está del todo bien, y si no tendría un trapo, mientras Frankie desde adentro escucha aterrada como se mueve por el porche, haciendo toda una serie de sonidos húmedos y repulsivos, luchando por encontrar una manera de llegar hasta ella, todo el tiempo diciendo lo bien que la van a pasar en el baile ahora que él volvió. El último deseo de la mina es que él desaparezca.
El cuento en sí no me impresionó mucho - aun cuando está bien logrado el detalle de que la escritora nunca te muestra al chico hecho pelota, sólo las impresiones de él que tiene ella desde adentro - y continué con mi día y mi noche tan tranquila.
Por supuesto, porque cual sería el punto de esto ni no hubiera algo mas, para la trasnoche, por algunar razón, la imagen de la chica sola en su casa, con el pibe tratando de entrar, me empezó a llegar.
Serían las 5 cuando Zeke me despertó pasándose a mi cama - se viene con almohada y tigre y es difícil hacerle lugar a todo el séquito -, y las 6 cuando lo llevé - con almohada y tigre - a la suya. Estaba yo sentada haciéndolo dormir - porque mi alma se había desvelado, el muy turro, como si supiera que era lunes - cuando escuché alguien murmurando en el pasillo. Me quedé mirando hacia allá, esperando que apareciera la Rorro, puteando bajito porque ahora sí que yo no me iba a poder volver a dormir. Pero nadie apareció y yo seguí con el enano, que me miraba con los ojitos brillantes en la semipenumbra. Al rato - porque estuvimos un rato - escucho un lloriqueo en el pasillo y ya cansada levanté la voz y le dije a la Ro que estaba con Zeke, que viniera de una vez. Pero la Ro no apareció y dejándo al cachorro mirando el techo fui a buscarla, para encontrármela metida en su cama perfectamente dormida.
... No fue uno de mis mejores momentos, no.
Asumo que los ruidos los hizo la Rorro - que no sería la primera vez que habla dormida - y por milagro de la acústica sonaron en el pasillo justo junto a la puerta del cuarto de Zeke, pero aún así, después de Frankie y su corsage, las 6AM se me hicieron claustrofóbicas.
Me fijé que Zeke estuviera dormido y me metí en mi cama donde me tapé hasta arriba. Para cuando quince minutos después Zeke se apersonó otra vez en mi cuarto, abrazado a su almohada y a su tigre, les hice un lugar y a la merda.
Entre el crío, la almohada, el tigre, el susurro, el lloriqueo, Frankie y la madre que los re parió a todos se me hizo larguísimo hasta que sono el despertador.

5 comentarios:

zorgin dijo...

a veces me pregunto por qué la gente comparte estas cosas aquí, y el que duerme con ellos ni se entera?...

zorgin dijo...

pero son solo preguntas al cosmos, ayya vaaaannn!!
sino, qué sentido tendrían los glocks, no?

Damaduende dijo...

Cuando yo le comparto todo esto al que duerme conmigo me mira con cara de "pobrecita, hace mucho que dejaste las pastillas?" asi que se lo dejo pasar...

Elena dijo...

y xq yo lo vengo a leer a las 3 de la mañana con toda la casa en silencio...?
ahhh si, x facebook, q ahora me postea las cosas cuando le da la gana

Elena dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.